¡Feliz San Valentín a todos! Y digo todos y todas porque no hay que tener una pareja acaramelada para celebrar el amor. El amor tiene muchos aspectos, muchos “hermanitos pequeños”.El amor no se limita a su versión romántica. Sentimos amor por los padres y lo llamamos amor filial; por los hijos y ese sentimiento se convierte en amor maternal o paternal, por los hermanos: amor fraternal; por Dios, el Universo, la Naturaleza o una expresión que exalta el espíritu y deviene Amor Ágape. Solo el amor relacionado con el sexo es Amor Eros. Y ¿quién de nosotros no experimenta una u otra forma de amor?

Si la palabra Amor te parece demasiado “fuerte” o pomposa, tenemos una lista de formas de amor que seguro que experimentas varias veces al día sin necesidad de que suenen campanitas ni aparezcan Cupidos con los ojos vendados: son los hermanitos pequeños del Amor. Aquí tienes algunos: caricia, ternura, cariño, beso, dulzura, intimidad, calidez … ¡Te animo a completar la lista! Lo importante es que celebremos la posibilidad de experimentar ese sentimiento en con todos sus matices. No creo que sea exclusivo del ser humano. Hay numerosos libros que demuestran lo contrario, por mucho que algunos escépticos quieran llamarlo instito. Me refiero a esa emoción que embarga a mi gatita cuando llego a casa que la lleva a poner inmediatamente el “motor” del ronroneo en marcha.

Tradicionalmente el corazón es el asiento del corazón. Y como he de hablar un poco de Antiaging, ahí van algunas reflexiones sobre el corazón, sobre todo porque las enfermedades cardiacas siguen siendo la primera causa de muerte en occidente, y especialmente porque parece que las mujeres disfrutamos de cierta protección ante los problemas cardiovasculares mientras menstruamos, pero al llegar la menopausia y pasada ésta, desgraciadamente la cifra de accidentes cardiovasculares entre las mujeres empiezan a equipararse a la de los hombres.

 

Hay algunas cosas importantes que hemos de saber, tantos hombres como mujeres, acerca del corazón. Me refiero aquí a estudios científicos que demuestran el papel protector de algunos Nutrientes Antiaging para prevenir accidentes cardiovasculares.

OMEGA 3

La comunidad científica empezó a interesarse por el Omega 3 a raíz de la publicación en la prestigiosa revista The Lancet las observaciones del Dr. Dyerberg quien afirmó que la ausencia de problemas del corazón entre los esquimales se
debía a la cantidad de aceite de pescado de su dieta. Corría el año 1971. Desde entonces los estudios e investigaciones sobre los beneficios del Omega 3 no han parado de crecer.

El Omega 3 es un gran protector del corazón, fluidifica la sangre, regula la formación de placa de ateromas en las arterias y mejora la circulación, además de tener capacidad antiinflamatoria.

El Omega 3 previene arritmias y normalizan el latido cardíaco. Mejora la elasticidad de las arterias, lo cual es especialmente importante para las personas con hipertensión.

El Omega 3 junto con fosfatidilserina, disminuyen los triglicéridos y aumentan el HDL (colesterol bueno en la sangre).

ANTIOXIDANTES

Todos los órganos son importantes en el organismo humano, pero el corazón y el cerebro son vitales. Tanto uno como otro dependen del buen estado de los vasos (arterias, arteriolas, capilares y vasos linfáticos) que los irrigan, llevándoles el oxígeno y los nutrientes que precisan. Hoy sabemos que los delicados canales que transportan la sangre son verdaderas prolongaciones del corazón, no tuberías con mayor o menor capilaridad. Tanto las células del corazón como las endoteliales (el endotelio es la capa de células que recubre el interior de venas y arterias) son extremadamente sensibles al daño oxidativo provocado por radicales libres.

En condiciones de aumento de demanda, como en situaciones de estrés, por el hábito de fumar o simplemente por hacernos mayores, el cuerpo va perdiendo su capacidad de fabricar anti-radicales con los que hacer frente al ataque de los radicales libres. Una molécula anti-radicales libres es lo mismo que decir antioxidante. El uso de complementos Antioxidantes es una de las primeras medidas a adoptar cuando decidimos seguir un protocolo antiaging y envejecer con salud.

Las vitaminas C y E, el ácido alfa lipoico, los betacarotenos, los minerales Selenio y Zinc, entre otros, son nutrientes con gran poder antioxidantes. Los hemos reunido todos en una fórmula ganadora: ANTIOXI PLUS.

La suplementación con antioxidantes conteniendo vitaminas C y E disminuyen la oxidación del colesterol, con lo que podemos reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares.

En septiembre de 2001 el American Journal of Clinical Nutrition publicó un estudio demostrando que tomar dosis importantes de vitaminas C y E, así como betacarotenos, podía disminuir la rigidez de las arterias que provoca la enfermedad llamada arterioesclerosis. Con la edad aumenta el endurecimiento de los vasos sanguíneos. Algunas vitaminas y antioxidantes pueden revertir el proceso.

La vitamina C , en dosis importantes, es capaz de relajar los vasos sanguíneos reduciendo la tensión en los hipertensos. Ambas vitaminas, C y E, fluidifican la sangre (disminuyen la agregación plaquetaria).

La vitamina C aumenta el colesterol bueno y mejora el perfil lipídico. (Ascorbic acid induces a favorable lipoprotein profil in women. American College of Nutrition 1996.). Su combinación con fosfatidilserina o lecitina de soja, aumentan su capacidad reguladora del colesterol.